Sigue atenuándose su caída y el rebote podría ser inminente---Actualizado el 1 ENE 10 La caída de las remesas de España sigue deteniéndose en el tercer trimestre de 2009 con un -9% España emitió remesas en el tercer trimestre de 2009 por valor de 1.888 millones de euros, un -9% menos que en el mismo periodo de 2008. Con esta caída las remesas de España acumulan seis trimestres de consecutivos en rojo, uno más que el crecimiento del PIB, que solo lleva cinco trimestres de caída. Es cierto, en cambio, que la crisis de las remesas parece atenuarse ya que se trata de la menor caída desde el cuarto trimestre de 2008 en que estos flujos se redujeron en un -20,6%, desde dónde pasaron al -17,1% del primero de 2009 y desde ahí al -13,2% del segundo trimestre de 2009. Frente a este porcentaje, la caída del -9% en septiembre confirma la tendencia hacia un rebote.
A pesar de de que estos datos del Banco de España puedan inducir cierto optimismo, sería ingenuo atribuir esta situación a que se esté atenuando la incidencia de la crisis entre los emigrantes. La estadística disponible nos indica más bien que se está recrudeciendo, aunque también parece que los emigrantes se están adaptando a la situación con nuevas estrategias. Efectivamente, la estadística señala un recrudecimiento, pues la edición de septiembre de 2009 de la Encuesta de Población Activa (EPA), señala que había en ese trimestre 295.000 extranjeros activos menos que en el mismo trimestre de 2008, lo que implica una reducción de los que trabajan realmente del -10,4%. Asimismo, la EPA reveló la existencia de 386.000 parados más que en el tercer trimestre de 2008. Todo ello a pesar de que entraron en España 100.000 emigrantes más que en 2008, llegando hasta 4,7 millones (cifra referida solo a mayores de 16 años).
De forma coincidente, la Seguridad social informa de que la media de extranjeros afiliados a la seguridad social ascendió en el tercer trimestre de 2009 fue de 1,89 millones, lo supone una caída del -9,5% frente al mismo periodo de 2008. Adicionalmente a estos datos, hay que considerar la notable caída del salario medio percibido por los emigrantes, debido al alto número de autónomos entre ellos así como a su práctica ausencia en los sectores de empleo con salario estable, como el funcionariado. Esto implica que la masa salarial de los emigrantes no solo se ha reducido en el -10,4% de los que no trabajan, sino que los que conservan su empleo cobran menos. ¿Porqué entonces las remesas caen solo un -9%? La explicación radica en las estrategias con las que los emigrantes están intentando adaptarse al nuevo escenario. Según un documento de trabajo que acabamos de publicar, los emigrantes encaran la situación haciendo economías, incrementando sus ahorros, o incluso desreagrupando familiares. Todo ello les permite destinar a remesas una mayor proporción de su renta. Pero esto solo significa que su sacrificio salarial es mayor, no que la crisis les afecte menos.