Bruselas señala que España es el primer remesador de la Unión Europea La Comisión Europea acaba de publicar un informe dónde revela que España es el primer emisor de remesas desde la Unión hacia terceros países. Este informe cifra en 8.986 millones las remesas emitidas en 2004 desde los países miembros hacia los países no miembros. De esta cantidad, España es el principal emisor con casi el 40%, o bien 3.258,3 millones. El informe, titulado Second EU survey on workers’ remittances from the EU to third countries ha sido elaborado por la Dirección General de Asuntos Económicos y Financieros de la Comisión. Para elaborarlo, investigaron los datos sobre remesas de todos los países miembros. Para sorpresa de la Comisión, de los 25 países miembros solo 14 disponen de una cifra sobre las remesas que envían a terceros países. Del resto, ocho carecen de cualquier dato al respecto. Entre ellos, figuran naciones recién incorporadas a la Unión y en las que la inmigración es un fenómeno de escasa relevancia, como es el caso de la República Checa, Malta o Eslovaquia. Pero también hay algunos miembros veteranos en los que la inmigración tiene unas dimensiones significativas y, por ello, cabe pensar que son importantes emisores de remesas como Dinamarca, Luxemburgo, Austria, Finlandia o Suecia.
Además, hay tres países que disponen de una cifra global de remesas, pero ignoran qué parte de ella va a países ajenos a la Unión, lo que ocurre con Estonia, Letonia y nada menos que el Reino Unido.
Consecuencias Por este motivo, la Comisión señala que “los resultados de este informe podrían estar distorsionados por problemas de “underreporting and misreporting”. Esto implica que en realidad, puede que España no sea el primer remesador de la UE, sino tan solo el país que más esfuerzos dedica a realizar una contabilidad adecuada de las remesas. Unos flujos que otros países no contabilizan o solo hacen en trazos muy gruesos. Inmediatamente después de publicar este informe, la Comisión ha convocado una licitación para contratar los servicios de un grupo de expertos que elabore una contabilidad europea sobre remesas, poniendo en cuestión, de forma implícita, los datos de los países miembros. Otras fuentes, como la UNCTAD, han calculado las remesas de la Unión Europea en cifras que multiplican por tres las que ahora ofrece Bruselas. Claro que esos datos se refieren a las enviadas a todos los países del mundo, y no solo a países ajenos a la UE como hace el informe de Bruselas.